Por un Diciembre otoñal…

 

Por un Diciembre otoñal…

¿Qué ha sido de la caída de las hojas? ¿Qué ha sido de los frutos otoñales? ¿Qué ha sido de los parques enmoquetados por hojas caducas?

Y es que aunque las calles ya estén completamente invadidas por luces navideñas…hay que recordar que ¡el otoño continua con nosotros!

Así, que para recordar que esta estación también dispone de tres meses al año…os presento este complemento otoñal para reivindicar esta romántica y tan melancólica estación.

Una combinación de plata oscura y verde hará resaltar todos los tonos de marrones, amarillos  y anaranjados que decidas vestir en estos últimos días otoñales.

¿Qué te parece?

Todos los materiales podrás encontrarlos en L’Antiga Casa Sala.

Cualquier duda y/o comentario, no lo dudéis: daleuntoque@gmail.com

Buscando el norte…

 

A veces es mejor parar, a veces es mejor pensar…a veces es mejor mirar, ubicarse y luego dar el siguiente paso. ¿Hacia donde? Hacia dónde tu quieras pero conociendo dónde y cómo queda todo alrededor de ti.

Hoy daleuntoque te propone este discreto pero útil colgante, con el que siempre podrás saber hacia dónde dirigirte…

Se define a la brújula como un instrumento de orientación que tiene su fundamento en la propiedad de las agujas magnetizadas. Ésta, siempre te indicará la dirección del campo magnético terrestre apuntando hacia los polos norte y sur; aunque te será inútil si estas de vacaciones en las zonas polares debido a la conevergencia de las lineas de fuerza del campo magnético terrestre.

Se cree que la brújula fue inventada en China aproximadamente en el siglo IX, pero esta es una teoría un poco controvertida. Además, existe un gran debate acerca de qué ocurrió con la brújula después de su aparición ya que se desconoce si de China pasó a Europa y luego al Medio Este o bien si ésta apareció en Europa de manera independiente.

En Europa, la brújula es oficialmente conocida desde el Renacimiento e inicialmente se creía que ésta obraba por brujería (de ahí su nombre) y apuntaba hacía el Polo Norte porque allí existía una gigantesca montaña de hierro en medio de una isla.

Y … ahora que vivimos en una sociedad dónde reina la última tecnología, ¿ te animas a lucir este colgante y formar parte de la historia de este precioso instrumento?

Espero que os guste…. daleuntoque@gmail.com

 

En un parque de Ginebra…

 

Hace ya unos meses tuve la oportunidad de viajar a Ginebra, una pequeña ciudad situada al sur-oeste de Suiza.

Ginebra es una ciudad rica y bien cuidada, con un casco antiguo bien preservado, tranvías y calles peatonales, numerosos parques y dispone de una vida cultural de gran riqueza. Además, es la ciudad de Europa que dedica mayor parte porcentual de su presupuesto a la cultura.

Y fue paseando por uno de sus verdes y espectaculares parques que encontré entre piedras y arena esta cáscara. No sé a que fruto puede pertenecer, pero al momento decidí cogerla y guardarla en mi bolsillo.

¿Por qué no darle un toque y utilizar esta para hacer un colgante?

 Si quieres hacer lo mismo, sigue estos pasos:

– Primero debes limpiar muy bien el que será el colgante de tu collar para eliminar cualquier tipo de arenilla que pueda quedar.

– Después, decide la zona que deseas pintar y píntala con un pincel fino que te permita trazar líneas bien definidas.

– Escoge el cordón que llevará tu collar y engánchalo alrededor de tu colgante. Deja los extremos bastante largos para poder hacer un nudo con estos.

– Por último, haz un doble nudo en tu colgante y pasa a través de él el cordón que te permitirá lucir este colorido y especial collar durante los meses de verano.

Venga va…¿te atreves a intentarlo? Escríbenos a daleuntoque@gmail.com